En este poema del maestro de poetas Federico, se refiere a toda una serie de cuestiones que le preocupan en lo más profundo de su corazón.
Son cuestiones a las que nadie puede dar una explicación comprensibles, pues se suceden después de la muerte.
Al pensar en la muerte y no saber que le espera después de ésta, es algo que le hace sentir en el corazón un temblor de estrellas y una pena tan blanca como una rosa de ese color.
No hay comentarios:
Publicar un comentario